Podría preguntar quién está estresado y, quien más y quien menos a lo largo de su vida se ha sentido estresado.
Un término del que se está hablando cada vez más es “el manejo del estrés”: cómo convivir con el estrés y cómo adaptarme al mismo. La sociedad actual está cada vez más inmersa en el estrés. Nos invade en todos los ámbitos de nuestra vida y tenemos que aprender a convivir con él y saber cómo manejarlo.

El estrés lo podemos definir como una reacción fisiológica del organismo en el que entran en juego diversos mecanismos de defensa para afrontar una situación que se percibe como amenazante o de demanda incrementada.
La primera reacción de defensa cuando sentimos el estrés es similar a la que encontramos en otros animales cuando empiezan a luchar: en ese momento deciden si luchan o salen corriendo.
El estrés inflama
El estrés es un proceso inflamatorio acelerado. El estrés inflama, y a través del cortisol se activan los macrófagos que liberan citoquinas proinflamatorias.

El rol del nervio vago en la inflamación
El nervio vago, una vía principal de comunicación entre el intestino, el cerebro y el sistema inmunológico, es esencial para reducir la inflamación y promover la relajación.
Tonificar el nervio vago, a través de técnicas como la respiración profunda, la meditación, es una herramienta poderosa para tratar condiciones como el estreñimiento, la ansiedad y la inflamación sistémica.

Estrés y obesidad
El estrés engorda. Debemos diferenciar entre un estrés agudo y un estrés crónico. Un estrés agudo puede, en determinadas personas, quitar el apetito, se hace “un nudo en el estómago”. Pero un estrés crónico, a través de la inflamación y la activación del cortisol, produce un cúmulo de grasa, principalmente a nivel abdominal. Por eso, cuando estamos bajo estrés crónico, tenemos que evitar los cambios bruscos de hipoglucemia-hiperglicemia.
El estrés provoca obesidad e inflamación, y la inflamación provoca estrés y obesidad.
Estrés y sueño
El estrés perjudica la calidad y cantidad del sueño. Los niveles altos de cortisol impiden un sueño reparador.

El estrés inflama, engorda, sube el colesterol, altera el sueño y desmotiva al ejercicio.
Abordar el estrés de la manera integral
En Wiñay Vida te ayudamos a través de una estrategia global:
•Mejorar la salud intestinal: A través de estrategias de nutrición consciente y personalizada.
•Terapias de ondas escalares y frecuencias: Para ayudar a equilibrar el sistema nervioso y a llegar a esos estados de relajación propias de la meditación.
•PSYCH-K®: Para liberar esas emocionales encalladas que perpetúan el estado de estrés que pueden llegar a cronificarse.

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